Aún en día resulta totalmente increíble que de una especie en peligro de extinción se pueda aprender y obtener muchas cosas. Y con esto nos referimos a dos de los pandas del zoológico de Memphis en Estados Unidos, denominados Le Le y Ya Ya, los cuales están ayudando al planeta con la producción de biocombustibles a través de maíz, tallos y diversos materiales no alimentarios.
¿Cómo colaboran los pandas?
Algunas investigaciones realizadas sobre las heces de los pandas, han dado como resultado que en ellas mismas se encuentran diversos microbios que podrían ser una verdadera solución para las fuentes nuevas de energía. Según el responsable de este hallazgo, si todo sale bien, se incorporarán dos pandas más a la investigación, denominados Er Shun y Da Mao, los cuales se encuentran en el zoológico de Canadá.
En los pandas se han encontrado más de cuarenta microbios, los cuales viven en el intestino de estos animales y podrían llegar a producir biocombustible mediante residuos vegetales de una forma más simple y económica. El etanol elaborado con maíz es uno de los carburantes alternativos más comunes en EEUU. No obstante, el uso de la soja, del maíz y otros cultivos alimentarios es preocupante, puesto que podrían aumentar sus precios o bien, tener escasez de los mismos.
¿Qué dicen los estudios?
El período de tiempo entre la comida y la defecación del panda es muy corto, por que sus microbios han de ser muy eficientes, y la eficiencia es una de las claves fundamentales para producir biocombustibles. Estos estudios ayudan a comprender mucho más sobre el sistema digestivo del panda en peligro de extinción y todos sus microbios. La relación entre los pandas y los microbios, al igual que la forma en la cual se obtiene la nutrición y la energía, es verdaderamente importante si se lo mira desde la conservación.